Koyoi, Oto Furu Sora no Shita

Me gustó tanto Eres mi vampiro esclavo que me he puesto a buscar otros mangas de Satoru Takemiya para quitarme el mono. Lamentablemente he descubierto que es un autor que sólo ha realizado tomos únicos desde que debutó en el año 2002, lo más largo que ha hecho es un manga de dos tomos u.u

Fui a investigar el más reciente (del 2011) pero no encontré scans así que me fui al siguiente, Koyoi Oto Furu Sora no Shita (del 2009) y lo he devorado esta tarde. Ahora mismo estoy bajando otro tomo más. Por lo que he podido ver en mangaupdates, Satoru Takemiya no solo lleva 10 años haciendo tomos únicos shôjo sino que además, suelen ser de temática fantástica.

Pero precisamente este no lo es. Trata sobre Miyabi, una chica que a raíz de un shock perdió la voz. De pequeña adoraba tocar el piano pero después de la muerte de su madre, su padre se desquició y empezó a moldear a su hija para que se pareciera a su querida esposa... De esta manera empezó a criticarla por todo lo que hacía, incluida su forma de tocar el piano porque no era suficientemente buena. Y así es como Miyabi acaba viviendo con un conocido de su madre, Naozumi, que es profesor de piano. Allí conocerá a Yue, un estudiante de Naozumi que precisamente decidió aprender a tocar el piano cuando escuchó una grabación de Miyabi cuando era pequeña...

Este tomo es una delicia visual porque, al fin y al cabo, Miyabi realmente no puede hablar y, por lo tanto, las expresiones faciales lo son todo. Hay varios mangas, sobretodo cuando se trata de one-snots o tomos autoconclusivos sobre música y casi todos relacionados con el piano. ¿Será que es un instrumento más glamuroso? Lo cierto es que si yo tuviera que escoger uno me quedaría con el piano... no me gustan los instrumentos de viento y me veo incapaz de acercarme a una guitarra o a un violín. Aunque no sería muy buena con el piano porque tengo las manos demasiado pequeñas. Arg, estoy divagando otra vez *consternación*

Miyabi es genial porque aunque no hable, sabe hacerse entender perfectamente y si alguien no quiere atender, ella siempre está dispuesta a lanzarle a la cara lo que tenga más a mano (da igual que sea una partitura de música o un móvil...). Pero Yue es aun mejor, es el típico chico borde pero mono que arrastra a Miyabi por donde a él le da la gana. Lo cierto es que tienen una relación muy rara y poco creible pero con este tipo de tomos no me planteo lo realistas que sean, solo me dejo llevar por las escenas... porque son muy bonitas.

También aparecen otros personajes como el padre de Miyabi (odioso), Naozumi, el profe (muy simpático aunque no pinta mucho en el manga) y Takashi, el primo de Yue (que es bastante pesado...) pero vaya que el manga se centra en cómo Miyabi intenta superar sus miedos e inseguridades aunque no acaba de seguir un camino lineal y predecible del todo.

La verdad es que al empezar a leerlo me he pegado un susto de muerte porque pensaba que la primera historia era un one-shot, tenía esa especie de final ambiguo que suele caracterizar a ese tipo de historias y pensaba que me iba a quedar con las ganas de más >_<

Cómo curiosidad, me ha llamado la atención que el autor sea un hombre! Estoy más acostumbrada a ver mujeres que dibujan shônen que no hombres que dibujen shôjo. Y el diseño es precioso <3 Ojalá se anime algún día con un proyecto más largo. De momento, rezaré a los dioses para que Ivrea se anime con algo más de este señor.

Y hasta aquí, El sonido que cae bajo el cielo de esta noche (traducción libre del título gracias al cutre-traductor de google) es un manga muy mono y se lee rápido así que yo lo recomiendo =)