Domingo 10: La Giudecca y San Giorgio Maggiore

Parece mentira que haya llegado al domingo. Este fue un día mosaico y es que se podría decir que no teníamos ni idea de qué hacer xD

Gracias a dios nos dejaron dejar las mochilas en el hotel hasta la tarde-noche cuando ya tiramos para el aeropuerto (suspiro de alivio). A estas alturas ya no recuerdo a qué hora nos levantamos… sólo sé que no fue tan pronto como el sábado pero tampoco tarde que hay que amortizar el tiempo =P

Gracias a la fecha de las fotos sé que a las 8.30 ya estábamos pateando y habíamos cruzado el Ponte della Costituzione. Fuimos hacia los Giardini Papadopoli porque según nuestra guía había una columna que constituye el único resto de la antigua Chiesa di Santa Croce (que dio el nombre al sestiere… aunque ya no esté) donde actualmente se encuentran los susodichos jardines. Sabíamos que estaba en una esquina y… sí, tuvimos que darle la vuelta entera (y atravesarlo…) porque de cuatro esquinas, era la última a la que llegamos ^^u (más tarde me di cuenta de que en realidad en la guía explicaba bastante bien como encontrarla pero en fin). Como veis en la foto no tiene nada de especial. En realidad nos molestamos en ir hasta allí porque la idea para esa mañana era ir a San Giorgio Maggiore pero nos levantamos tan pronto que había que matar el tiempo haciendo algo de mientras… Si os fijáis con detenimiento, se puede leer la palabra TIKHIL.

Después de esto fuimos a coger un vaporetto que nos dejara en la Giudecca, una isla paralela a Venecia (aunque diría que forma parte de ella). Debo decir que al tomar esta dirección fue la primera vez que nos movimos en vaporetto (sin contar la escapada a las islitas del viernes) sin pasar por el Gran Canal así que tuvimos vistas nuevas! Entre ellas esta casa tan hecha polvo, la verdad es que hay cosas muy desmejoradas por Venecia, hace 300 o 400 años la ciudad tenía que ser aun más preciosa que ahora.

El caso es que el vaporetto nos dejó justo delante del Redentore (una iglesia) que… estaba cerrada. Decidimos ir andando hasta San Giorgio Maggiore sin saber que la Giudecca y esta pequeña isla NO están conectadas por NADA. O sea, básicamente nos dimos la pateada del siglo hasta un punto muerto y tuvimos que volver TODO el camino andando atrás hasta la misma parada donde habíamos bajado para coger el mismo vaporetto que nos dejara un par de paradas más adelante.

Después de estos pequeños incidentes llegamos por fin a San Giorgio Maggiore que resultó que abría a las 9 o una cosa así, así que podríamos haber ido hasta allí directamente y nos habríamos ahorrado muchos problemas y muchos guiris de más también. No tener horarios es lo peor del mundo… really. Y se nos hicieron las 10 pero bueno, aun teníamos todo el día por delante y subimos al campanario. Sí, nos abstuvimos del de San Marcos pero a este sí queríamos subir porque era más barato, menos turístico y con vistas a toda Venecia (más o menos). Cosa rara, el precio no cuadraba con el que teníamos apuntado… debían haber sido 3 y resultaron ser 5€. Un poco timo pero a cambio estuvimos media hora en un espacio super reducido haciendo fotos clónicas una detrás de otra xD

Al bajar echamos una ojeada a la catedral pero era bastante sosa… almenos a mí no me mató pero hicimos más fotos de suelo con efecto 3D!

Después de esto volvimos hacia atrás para ver Redentore que ya había abierto y me pareció aun más soso… Yo sabía que detrás del altar había una sala con cuadros y una puerta hacia la sacristía (o algo así) y allá que nos fuimos. Mal rollo porque no había nadie y había cabezas de santos que daban mucho yuyu. Cuando salimos de allí habían colocado una cinta que impedía el paso al altar… y pasamos por encima… como quien no quiere la cosa, parece ser que entramos donde no debíamos pero bueeeeeeeno.

Después de nuestro paseo por la Giudecca, San Giorgio Maggiore y sus dos sosas iglesias decidimos volver a Dorsoduro. Entramos en una iglesia random que había al lado de la parada de vaporetto (Chiesa di Santa Maria del Rosario) que también era feílla (el domingo fue el día de las iglesias sosas, feas y aburridas). Al salir encontramos una heladería y probé suerte con un Stracciatella asqueroso que tenía algo verde y que se fue directo a la basura: eso es dinero bien empleado sí señor!

Y nuestra intención en Dorsoduro era ver la Salute  que el día anterior llegamos cuando ya había cerrado. Yendo hacia allá pasamos por el squero di san Trovaso, un lugar donde reparan góndolas y que estaba desierto pero le hicimos una foto a algo curioso que había allí y que no tenemos ni idea de lo que es O.ó

Volvimos a pasar tanto por el taller de Loris Marazzi (estaba la puerta abierta!!! Íbamos a entrar cuando un chico que dedujimos que era el tal Marazzi nos miró con mala cara y nos dijo que abría por la tarde o.o) donde hicimos un par de fotos sin el escaparate de por medio y por la tienda de los que hacen dibujos con números. De verdad que hubiera comprado algo si no fuera porque lo único que parecía estar a la venta eran unos pósters a 18€ y tampoco es plan de derrochar.

A estas alturas de la mañana yo estaba un pelín cabreada con el mundo por como habían ido las cosas pero la Biennale me salvó… y es que me encantan las cosas psicodélicas. Ya os dije en la primera entrada que en 4 días vimos muchas cosas pero si os extrañó la exposición gratuita del primer día o los músicos del jardín de piedra o la estatua del payaso de McDonalds degollado… esto es lo mejor. Una especie de patio que daba a varias salas, todas llenas de cuadros y estatuas raras, esta mini exposición en concreto parecía pertenecer toda a autores asiáticos porque los nombres en los que reparé eran chinos y japoneses (o coreanos o de por ahí vaya ^^u). Os dejo varias fotos para que veáis qué raro era todo =P Una hormiga multicolor gigante, coches saliendo de huevos, una chica desnuda y cabezona a la que le salía agua del cuello… a cada cual más surreal, really, pero me quedo con lo “japonés”, la chica otaku me enamoró! Ese perrito que se ve de fondo no es el de Llegando a Ti? <3

Como este día fue más corto que los demás pero tampoco tanto como para hacerlo en una sola entrada, lo dejo aquí por hoy.