Y en esta entrada relato nuestras últimas 6 horas en Venecia en las que, a pesar de que todo estaba a punto de acabar, no nos faltaba energía porque al fin y al cabo tener la tarde por delante en un viaje de menos de 4 días es mucho tiempo.
Como decía en la última entrada, nos encaminamos a Santa Maria della Salute, una iglesia enorme con una gran cúpula pero que no era nada del otro mundo por dentro así que ni siquiera me molesto en poner fotos porque no vale la pena.
Con esto, finalizamos nuestro recorrido por Dorsoduro y decidimos ir a Castello que era el único sestiere de Venecia que nos quedaba por visitar. Fuimos hacia el Arsenale para ver su entrada (prohibida) y los leones que la custodian. La biennale nos volvió a sorprender con unas raíces rojas trepando desde el agua ^^
Y llegados a este punto, el último lugar que queríamos ver sí o sí antes de marcharnos era una iglesia más, en Cannaregio de nuevo pero me desubiqué un poco con las paradas de vaporetto y no tenía muy claro por dónde tirar. Lo más práctico parecía atravesar todo Castello y coger el vaporetto por la parte “norte” de Venecia en vez de en el Gran Canal y así lo hicimos pero eso nos obligó a hacer una caminata de media hora bajo el sol abrasador justo a mediodía, sin haber comido, sin sombra y sin muchas ganas así que se nos hizo un pelín horrendo pero bueno, llegamos!! De camino pasamos por una puerta que no llevaba a ningún sitio, un arco en medio de la calle vamos, a lo Harry Potter, lol
Finalmente llegamos a Chiesa di Madonna dell’Orto (que no es ese último lugar que digo que queríamos ver) que la pillamos cerrada el primer día y así fue como encontramos aquella exposición gratuita de arte psicodélico (la del teletubbie). La encontré más mona que ninguna de las que llevábamos vistas ese día pero tampoco creo que fuera excepcional.
Esta zona ya nos la conocíamos así que no tuvimos problema para llegar a una calle comercial con un mc donald’s. Que por cierto, mirad qué encontramos de camino!
Después de comer volvimos al hotel a repostar (sentarnos un rato a descansar a la sombra y beber algo fresquito vaya) y nos volvimos a poner en marcha, esta vez sí, para ir a “ese lugar” que no es otro que otra iglesia!! Pero de esta sí que me enamoré <3 Os hablo de la Chiesa di Santa Maria Assunta detta I Gesuati que es preciosa por dentro, ojalá os pudiera poner un vídeo o un montón de fotos pero ya sabéis, “no photos" y esta vez sí que nos echaron la bronca y nos prohibieron hacer más… Sólo por entrar aquí ya me valió la pena el domingo entero. Que por cierto, también fue en esta iglesia en la única (a parte de la basílica de San Marco) en la que me llamaron la atención sobre mi atuendo y me hicieron taparme (pero siempre llevo mi pañuelo conmigo así que no problema =D)
Para acabar el día, la semana y nuestra estancia en Venecia fuimos a un último lugar: la Isola San Pietro, que está en un extremo de Venecia, al final de Castello. Y básicamente fuimos y volvimos porque la iglesia que había que ver allí ya había cerrado. Le hicimos una foto al campanario, no por torcido sino por blanco inmaculado, y volvimos sobre nuestros pasos.
Quizá parezca un final poco glamuroso pero así acaba nuestro viaje a Venecia. Poco antes de ir dirección al aeropuerto dimos una última vuelta por las calles comerciales de al lado del hotel para acabar de hacer las compras de souvenirs y eso y aproveché para hacer una foto a una tienda que siempre me llamaba la atención al pasar (hay muchas parecidas en Venecia pero esa en concreto la vi varias veces porque la teníamos cerca).
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