domingo, 3 de enero de 2016

Puella Magi Madoka Magica: Rebellion

Rebellion es la última licencia que nos trajo Ivrea hace algo más de un año de la franquicia de Puella Magi Madoka Magica. Los spin-offs se siguen acumulando en Japón pero, de momento, Ivrea ha optado por las historias troncales. En este caso, los tres tomos de Rebellion adaptan la película de animación que desarrolla los hechos inmediatamente posteriores al final del anime original.

Gracias al sacrificio de Madoka Kaname, todas las puella magi se liberaron de la maldición de convertirse en brujas. Mientras que incluso sus padres olvidaron a Madoka, Homura Akemi es la única que la recuerda. Aunque ya no existan las brujas, las puella magi deben seguir luchando contra los demonios... Entonces, ¿cómo es posible que Mami, Kyoko, Sayaka y Madoka luchen ahora contra pesadillas? Una nueva alumna se transfiere al instituto al que van todas juntas y se trata de la mismísima Homura. ¿Qué está pasando? ¿Por qué nadie recuerda nada?

¿Alguien dijo déjà vu?
Ha pasado un año desde que leyera The different story y mucho más desde que hice lo propio con la historia original por lo que al abrir el primer tomo de Rebellion no pude sentir otra cosa que no fuese desconcierto. Al principio llegué a pensar que no recordaba bien el final pero, como acostumbran las tramas de Madoka, esa sensación de confusión es totalmente intencionada.

Si el manga original está más centrado en Madoka y Sayaka y the different story aporta información sobre personajes más secundarios como Kyoko y Mami, Rebellion es, sin duda, la historia de Homura; algo que celebro ya que me parece el personaje más complejo de la saga. Tanto Madoka como Mami se presentan, en todas las subtramas, como heroínas perfectas: alegres, altruistas y buenas. Sayaka y Kyoko, en cambio, cuentan con dilemas internos que les han hecho madurar, de forma que cada una ha escogido una forma de sobrellevarlo.


Si estáis leyendo esta reseña imagino que habéis leído ya las precuelas por lo que no me andaré con rodeos: Kyoko acepta el pacto de Kyubey para así ayudar a su familia pero cuando su padre la descubre se vuelve loco y se suicida, a partir de ese momento se convierte en una persona totalmente distinta y decide actuar en solitario, solo para su propio beneficio; en cambio, Sayaka se convirtió en puella magi para salvar al chico que le gustaba pero, al final, no tuvo valor para pedirle salir, se le adelantó su amiga Hitomi y se obcecó con seguir ayudando a la gente hasta que, llena de amargura, se convirtió en bruja.

Sin embargo, Homura aparece desde el principio como el personaje más misterioso y, cuánto más sabemos de ella, más atormentada se revela, habiendo revivido las mismas tragedias tantísimas veces que es un milagro que haya conservado su cordura. Cuando, tras tanto sufrimiento, ve truncada su obsesión de salvar a Madoka del pacto y, no solo la pierde para siempre, sino que queda condenada a ser la única que la recuerde, empieza a dudar de sus propios recuerdos, preguntándose si Madoka existió de verdad. Lo que sucede después, y que da pie al título que hoy me ocupa, me parece la evolución más congruente a la par que brillante con la que podían haber dado los guionistas después de un final que podría haber sido perfectamente el definitivo.


Poco más puedo decir de este título sin destripároslo totalmente ya que, igual que ocurría con la historia original, el guión no deja de dar vuelcos de 360 grados en un espacio muy limitado. De hecho, me he leído los tres tomos del tirón en media tarde casi sin darme cuenta, es de lo más fluido. Casi lo criticaría por ello... Se dedica una proporción muy elevada de viñetas a una mezcla entre escenas de acción y de otras más costumbristas que poco o nada aportan a la trama pero que, a la vez, son muy necesarias para que el guión resulte coherente. Los autores tampoco podían permitirse que este manga se limitara a una sucesión de diálogos reveladores ya que entonces se perdería parte de la esencia de la franquicia. En conclusión, creo que se ha logrado el mejor balance posible aunque me quedo con ganas de mucho más.

La guinda del pastel a un guión muy bien desarrollado es el dibujo, que sigue mejorando tras aquel estilo que me disgustó sobremanera en la historia original y cuya evolución en la primera secuela tanto agradecí. Los diseños surrealistas y macabros que parecen sacados de una alucinación alcanzan su máximo esplendor en esta secuela. Quizás las escenas de lucha me han costado un poco de seguir debido a los ataques múltiples de seis personas a la vez con armas tan distintas que son difícilmente combinables: espadas, lanzas, escopetas y pistolas, arcos y bombas, todo intercalado.

Y hasta un "nuevo" personaje ;)
En resumen, me sentí de lo más contrariada al empezar a leer esta historia y ya pensaba que iba a ser una decepción pero nada más lejos de la realidad: puede que se trate del arco argumental que más me ha gustado de toda la saga, con un dibujo fantástico y un guión trepidante en el que los guionistas queman todas sus naves a un ritmo endiablado. Si os han gustado las historias previas de esta saga, desde luego no podéis dejar pasar Rebellion.

3 comentarios:

  1. A mi tambien me parece la mejor saga de Madoka Magica. Tienes que ver la pelicula. Es muy superior a esta adaptacion a manga e incluso a la serie original.

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  2. Me sorprendió gratamente, y te recomiendo ver la última peli de Rebellion, que presente un final alternativo muy interesante.

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  3. @Salva. JE @Yer_Wells ¡me apunto vuestra sugerencia chicos! Quizá después de ver la película empiece a echar pestes del manga...!

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