Nueva serie que empiezo. Como que ya nos hemos puesto al día con How I met your mother había que buscarse una nueva serie que ver y hacía tiempo que Breaking Bad me llamaba la atención. Ya que la primera temporada tiene tan solo 7 capítulos decidimos hacer un maratón y los vimos los siete del tirón aprovechando las vacaciones de Navidad.
Walter White es diagnosticado con cáncer de pulmón a los 50 años. Se pluriemplea como profesor de química en un instituto y como cajero/limpia-coches en un negocio de lavado de coches para mantener a su familia. Su mujer, Skyler, está embarazada por segunda vez y su hijo adolescente Walter junior padece parálisis cerebral desde que nació por lo que tiene dificultades para hablar y caminar. Con este panorama y múltiples dificultades económicas, Walter no solo decide no contarle a nadie el asunto del cáncer sino que decide introducirse en el negocio de las metanfetaminas para conseguir dinero que legar a su familia cuando él ya no esté. Pero parece muy poco concienciado con lo peligroso que es tratar con narcotraficantes...
Con esta premisa tan peculiar comienza Breaking Bad. Walter tiene una mente brillante pero se podría decir que tiene una vida de lo más desgraciada. Debe enfrentarse cada día a adolescentes insoportables para enseñarles lo que para él es una maravilla de la ciencia mientras que para ellos es de lo más aburrido. Por si ser profesor de instituto no fuera suficientemente descorazonador, con su sueldo no le llega para mantener a su familia (su mujer Skyler se dedica a escribir cuentos infantiles pero no parece tener mucho éxito) así que tiene un segundo trabajo para el que claramente está sobrecualificado. Mientras tanto debe soportar como su cuñado le restriega sus éxitos por la cara y sus antiguos amigos y compañeros han tenido éxito en aquello que él no pudo.
Después de llevar una vida aparentemente saludable, al ser diagnosticado con cáncer de pulmón se ve en un callejón sin salida. Totalmente desesperado ante la certeza de que, como mucho, solo alcanzará vivir dos años más decide tomar medidas drásticas para conseguir dinero fácil. Debido a sus amplios conocimientos de química no tendrá problemas para sintetizar metanfetaminas pero necesita de alguien que le ayude a venderla para lo que contacta con un ex alumno suyo que sabe que está metido en problemas.
Así es como se forma la más que extraña pareja de Jesse Pinkman y Walter White que aúnan fuerzas para crear un laboratorio clandestino en una furgoneta. Pero como que Jesse está con el agua hasta el cuello van a tener problemas nada más empezar...
Creo que lo que me sugiere esta serie es lo cruda que es la vida. Es todo muy triste, muy angustioso, hasta deprimente a veces. Es un reflejo de la mierda de vida que tienen muchas personas en una potencia mundial como es Estados Unidos. Y desde luego es una serie muy poco convencional al tratar desde un punto de vista tan curioso el mundo de las drogas.
Algo que me llama mucho la atención en todos los capítulos es el silencio. Hay varias escenas en las que no pasa nada, solo hay silencio, creo que a veces, más que los lloros o los gritos, el silencio es la mejor arma para mostrar al espectador la desesperación de los personajes.
Pero desde luego, si la historia ya de por sí es buena, y la caracterización de la sociedad y, más especialmente, de los estratos sociales más bajos es muy fidedigna, Breaking Bad destaca por los personajes, muy humanos, con virtudes y defectos, bien definidos y muy particulares.
Algo que me maravilla es la sangre fría y la mente analítica que posee Mr. White, que se pasa toda la serie analizando todas las situaciones minuciosamente y explorando todas las alternativas por ilegales, desagradables o inmorales que resulten.
En realidad, en Breaking Bad absolutamente todo me llama la atención, literalmente, desde el principio hasta el final. Y es que acostumbrada a los finales de temporada con cliffhanger, el último capítulo de esta breve e introductoria primera temporada no parece realmente un final. Y precisamente por eso te deja una sensación extraña en el estómago.
Tuve mis reservas a la hora de ver esta serie porque sabía que tenía escenas algo desagradables y no sabía qué podría encontrarme pero ahora que he empezado solo puedo pensar en devorar todas las temporadas que hay disponibles.
Ya para acabar, creo que se puede resumir la esencia de esta primera temporada en ese breaking bad: ver cómo el intachable Walter White acaba codeándose con narcotraficantes y cayendo irreversiblemente en una espiral de delitos y mentiras sin fin.
Walter White es diagnosticado con cáncer de pulmón a los 50 años. Se pluriemplea como profesor de química en un instituto y como cajero/limpia-coches en un negocio de lavado de coches para mantener a su familia. Su mujer, Skyler, está embarazada por segunda vez y su hijo adolescente Walter junior padece parálisis cerebral desde que nació por lo que tiene dificultades para hablar y caminar. Con este panorama y múltiples dificultades económicas, Walter no solo decide no contarle a nadie el asunto del cáncer sino que decide introducirse en el negocio de las metanfetaminas para conseguir dinero que legar a su familia cuando él ya no esté. Pero parece muy poco concienciado con lo peligroso que es tratar con narcotraficantes...
Con esta premisa tan peculiar comienza Breaking Bad. Walter tiene una mente brillante pero se podría decir que tiene una vida de lo más desgraciada. Debe enfrentarse cada día a adolescentes insoportables para enseñarles lo que para él es una maravilla de la ciencia mientras que para ellos es de lo más aburrido. Por si ser profesor de instituto no fuera suficientemente descorazonador, con su sueldo no le llega para mantener a su familia (su mujer Skyler se dedica a escribir cuentos infantiles pero no parece tener mucho éxito) así que tiene un segundo trabajo para el que claramente está sobrecualificado. Mientras tanto debe soportar como su cuñado le restriega sus éxitos por la cara y sus antiguos amigos y compañeros han tenido éxito en aquello que él no pudo.
Después de llevar una vida aparentemente saludable, al ser diagnosticado con cáncer de pulmón se ve en un callejón sin salida. Totalmente desesperado ante la certeza de que, como mucho, solo alcanzará vivir dos años más decide tomar medidas drásticas para conseguir dinero fácil. Debido a sus amplios conocimientos de química no tendrá problemas para sintetizar metanfetaminas pero necesita de alguien que le ayude a venderla para lo que contacta con un ex alumno suyo que sabe que está metido en problemas.
Así es como se forma la más que extraña pareja de Jesse Pinkman y Walter White que aúnan fuerzas para crear un laboratorio clandestino en una furgoneta. Pero como que Jesse está con el agua hasta el cuello van a tener problemas nada más empezar...
Creo que lo que me sugiere esta serie es lo cruda que es la vida. Es todo muy triste, muy angustioso, hasta deprimente a veces. Es un reflejo de la mierda de vida que tienen muchas personas en una potencia mundial como es Estados Unidos. Y desde luego es una serie muy poco convencional al tratar desde un punto de vista tan curioso el mundo de las drogas.
Algo que me llama mucho la atención en todos los capítulos es el silencio. Hay varias escenas en las que no pasa nada, solo hay silencio, creo que a veces, más que los lloros o los gritos, el silencio es la mejor arma para mostrar al espectador la desesperación de los personajes.
Pero desde luego, si la historia ya de por sí es buena, y la caracterización de la sociedad y, más especialmente, de los estratos sociales más bajos es muy fidedigna, Breaking Bad destaca por los personajes, muy humanos, con virtudes y defectos, bien definidos y muy particulares.
Weirdest couple ever |
En realidad, en Breaking Bad absolutamente todo me llama la atención, literalmente, desde el principio hasta el final. Y es que acostumbrada a los finales de temporada con cliffhanger, el último capítulo de esta breve e introductoria primera temporada no parece realmente un final. Y precisamente por eso te deja una sensación extraña en el estómago.
Grotesco |
Ya para acabar, creo que se puede resumir la esencia de esta primera temporada en ese breaking bad: ver cómo el intachable Walter White acaba codeándose con narcotraficantes y cayendo irreversiblemente en una espiral de delitos y mentiras sin fin.
La tengo en pendientes, creo que cuando me ponga al día con SoA la empezaré con Rub. Por cierto, tienes que ver Sons of Anarchy/Hijos de la Anarquía.
ResponderEliminarEsta serie es brutal... te guste o no, desde luego no deja indiferente. SoA me la han recomendado mucha gente, habrá que darle una oportunidad
ResponderEliminares un seriazo!!
ResponderEliminarEs brutal, yo la empecé a ver en TV3 el verano pasado y ya falta poco para que se pongan al día... y esperar que hasta julio no podremos seguir viendola... muero, pq ya será el final final.
ResponderEliminarLa 1ª y sobretodo la 2ªT son las mejores, la 3ª para mi es la más floja, y la 4ª y 5ª están bien pero nada como las 2 primeras >___<
Yo con esta serie flipo mucho y me pongo super nerviosa viendo capítulos... y me acabas de recordar el de la bañera y el techo viendo las imagenes, vaya grito pegué en algunos capis, ya verás, ya xDDDD Walter White es un puto manipulador, uno muy bueno, y Jessie es el único que tiene una evolución más humana... pfff... es que les pasan tantas cosas a estos 2... te esperan muchas sorpresas, ponte al día pronto *___*
Aparte de la reseña, veo muy buenos comentarios... pero creo que voy a pasar... bastante mierda hay ya de por sí en la realidad como para ver una serie de este tipo =/
ResponderEliminarSerie imprescindible. De lo mejor de los últimos años, y encima a cada temporada se supera, con unos guiones impresionantes.
ResponderEliminarYo me acabo de terminar la segunda (no te haré spoilers) XDDD
ResponderEliminarAl principio Walter me caía bien, sigo pensando que se ha convertido en lo que es por las circunstancias pero se vuelve manipulador y hace cosas horribles. No sabía lo de Skyler, creia que simplemente dejó de trabajar.
Pero lo de los éxitos es porque él no quiso... se quiso dedicar a la enseñanza, no se, culpa suya, entiendo que le fastidie pero fue su elección.
Por lo demás estoy deacuerdo contigo, enseña la rudeza de la vida para algunas personas, eso si, si alguno se quiere dedicar a las drogas (cosa extraña porque esta serie tiene justo el efecto contrario) ya tiene mucha información...
Sabía que esta serie tenía escenas dura pero... supera las expectativas, y a veces no son escenas sino sonidos o pensamientos que te hacen un nudo en la garganta y a veces arcadas, desde luego nada recomendable a los sensibles XD