Sant Jordi'13

No sé si recordaréis mi crónica de Sant Jordi del año pasado, pero el caso es que pasarme el día entero en Barcelona para conseguir CINCO firmas me dejó peor que agotada. Así que decidí no repetir experiencia. Y para este Sant Jordi me hice un planning más tranquilo.

En realidad, quizá hubiera sido algo más kamikaze si hubiera tenido el día totalmente libre pero pasé gran parte de la mañana haciendo cosas relacionadas con la uni así que no pude "disfrutar" de Sant Jordi hasta las 12 del mediodía. Problema: yo quería una firma de Albert Espinosa. Ilusa de mí. Firmaba de 12 a 14h en Casa del Libro en Passeig de Gràcia y allí que me fui pero llegué a las 12.20. De alguna manera, me adentré en la marea de gente que se había creado entre los tenderetes con los autores firmando y la tienda en sí. En esa marea humana había gente intentando subir, gente intentando bajar, gente intentando entrar en la tienda, gente haciendo cola, gente mirando quién firmaba... Maldita la hora en la que me metí ahí, yo estaba buscando la cola de Albert Espinosa pero es que había como 20 autores firmando a la vez y fui incapaz de discernir qué gente estaba haciendo cola y, si la hacían, para qué autor era. Al final, como medida desesperada para salir de ahí y poder volver a respirar me metí en la tienda de Casa del Libro y salí por una puerta auxiliar que da a otra calle. Y, ¡sorpresa! allí estaba el final de la cola para Albert Espinosa (qué risas... daba la vuelta a la manzana). Como iba sola y me daba mucha pereza hacer una cola interminable sola al final pasé.

Y me fui a Norma. Porque desde hace un tiempo que me llama poderosamente la atención el libro Hoy me ha pasado algo muy bestia, primera parte de una trilogía de Daniel Estorach que, como se anunció en el Salón del Cómic, será adaptada a cómic saliendo a la venta a finales de año si no recuerdo mal. Llegué a Norma a eso de las 12.50, me compré allí mismo el libro y el autor me lo firmó un poco in extremis (acababa de firmar a la una) con la bendita fortuna de que el dibujante del cómic también estaba allí con lo que conseguí doble firma <3

Llegados a este punto... estaba contenta con mi firma pero algo triste de haberme quedado sin la de Albert Espinosa y, aun más, la de Laura Gallego (que ni siquiera sabía que estaría firmando y me enteré de casualidad en plena marea humana cuando vi un cartelito con su nombre en el caos que generan los de Casa del Libro).

De 13h a 14h estuve de peregrinaje por Plaça Catalunya porque quería comprar un libro para regalar y que me lo firmaran (sin éxito) y la siguiente media hora me la pasé sentadita en Plaça Urquinaona dejando reposar los pies y esperando a que Borja volviera de la uni y fuéramos a comer juntos como es tradición en este día tan señalado.

Fue entonces cuando quedé con mi querida Semi_Lau que me consiguió el último tomo de Fábulas editado por Planeta: Supergrupo. Y gracias a ella ya respiro tranquila porque he comprado todos los tomos actualmente descatalogados de la antigua edición de Fábulas, así que te vuelvo a dar las gracias desde aquí por hacerme el favor =)

Y bueno, fuimos a comer y sin ganas de esperar a las 17h que era cuando se reiniciaban las sesiones de firmas decidimos volvernos para casa y tomarnos la tarde con calma. Así que este Sant Jordi ha sido diametralmente opuesto al del año pasado y me he quedado con ganas de muchísimas firmas pero al menos hoy puedo caminar sin sentir como si mil agujas se me clavaran en las piernas a cada paso.

Crítica de Sant Jordi:

1) Me parece fatal que no haya ni una sola web que recoja todas las firmas que se realizan este día. Que es que cuesta enterarse de quién firma y de quién no. La mejor opción es buscar todos los nombres de autores que te gusten a ver si firman o no este año y a parte de que de esa manera pierdes una barbaridad de tiempo, seguro que no caes en todos los autores de los que podrías querer tener una firma... Es que no caí en buscar si firmaba Laura Gallego o no, de verdad, qué puta rabia.

Es de LOCOS

2) Hay muy pocos establecimientos, por no decir ninguno, que tengan un espacio habilitado para hacer colas. Es que en serio, es peor que en el Salón del manga. Llegas ahí, ves una marabunta de gente, no sabes dónde se supone que te tienes que poner, no hay manera de localizar el final de las colas, no se puede discernir qué gente está haciendo cola, quién está haciendo fotos desde la lejanía y quienes, simplemente, pasan por allí. Y meterte en ese follón resulta opresivo, asfixiante y ansiogénico.

Como supongo que destila mi entrada, estoy un poco de malhumor por cómo combinó el día y por cómo está todo montado. Pero en fin, no todos los años puedo volver a casa con las 1001 firmas; ni tampoco es saludable.

Para acabar, os enseño el ramo de rosas rojas y blancas que me regaló Borja al acabar el día, como es tradición también. Y, a falta de nadie que me regale libros este día, me he autoregalado yo unos cuantos:

Como veis, todo ediciones de bolsillo, portables en el bolso/mochila camino de la uni a ver si así me reengancho un poco a la literatura que hace eones que no abro un libro o.ò