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Sigo con mi maratón de Inu-yasha (esta vez sí) y alcanzo por fin el punto en el que me quedé viendo el anime cuando lo echaban por el K3 hace unos años (sé que tiempo después consiguieron emitir más capítulos pero para cuando me enteré ya iba tarde y lo dejé pasar).

Estos tomos me han dejado muy sorprendida. No sé si porque es la primera vez que leo Inu-yasha sin saber qué va a pasar o si realmente han sido unos capítulos muy espectaculares. Y digo capítulos porque ese esplendor ha durado más bien poco. No me gusta nada el rumbo que está tomando ahora mismo. Desde cierto punto álgido del tomo 38 decae bastante en los dos siguientes.

Y, qué demonios, voy a soltar spoilers a mansalva como siempre pero es que esta vez son más heavys que de costumbre así que aviso antes de soltarlo todo.

Kohaku recupera la memoria y aun así sigue matando a gente y monstruos para que Naraku no se dé cuenta… (dios mío, que mal me lo ha hecho pasar el pobre). Kagura decide proteger a Kohaku (aun no me lo creo) y muere. Pero es que, omfg, Naraku es tan hijo de puta, a la vez que la hace libre, la envenena para que muera en pocas horas. La cara de tristeza de Kagura antes de morir… nunca pensé que Rumiko Takahashi pudiera plasmar una emoción así. Prepara una escena preciosa en que Sesshômaru intenta salvar a Kagura con la Tenseiga (demostrando que realmente es más bueno que el pan y que es el mejor personaje ever) y no puede pero ella sonríe al verlo… Ha sido la escena más emotiva que he podido leer en 40 tomos y dudo mucho que en lo que me queda por leer haya nada que pueda superarlo… Es que como no van a hacerse odiosos Inu-yasha, Kagome, Kikyo, Sango y Miroku siempre dando vueltas a lo mismo? De verdad, es que los secundarios se los comen, con patatas. Kagura es un GRAN personaje, se merece un homenaje o algo. Fue la más lista, la que no quería limitarse a estar bajo las órdenes de Naraku, la que pensaba por sí misma, la que tan solo ansiaba la libertad…

Y han sido unos tomos moviditos porque no solo muere Kagura, también lo hace el cabrón de Hakudôshi. Y claro, tantos esbirros muertos no hacían balance así que aparece un tal Byakuya que da muy mal rollo (para variar). Lo que no me esperaba es que Hakudôshi traicionara a Naraku, no sé, se parecía tanto al propio Naraku que no me había parado a pensar que justo por eso no podía estar de acuerdo con que fueran dos. Pero no tiene sentido, la otra mitad de Hakudôshi es el corazón de Naraku que se ha revestido con la armadura de Môryômaru que pasó a ser Goryômaru que volvió a ser Môryômaru pero que en realidad son todos uno… pero al ser ellos mismos el corazón de Naraku no pueden destruirle! Y tampoco sé qué ambicionan exactamente… no sé, es todo muy raro, cada vez más. Yo creo que el único alter ego de Naraku de fiar es Kanna xD

Y lo que más me repatea es el tema de las armas y tal. Menuda pérdida de capítulos entre que Kôga consigue las goraishi, Inu-yasha y compañía descubren la existencia de las Dakki y se enfrentan a una y la Tessaiga digievoluciona ooootra vez. Entre eso y los capítulos de relleno que se basan en a) las travesuras de Shippô, b) los líos de faldas de Miroku, c) Kikyo apareciendo y desapareciendo cuando le viene en gana y sembrando la discordia y d) Kagome volviendo a su mundo cada x tiempo para hacer de transición entre arcos argumentales y pretendiendo aportar humor supongo.

Lo único que me gusta es el rumbo general que toma la serie. Porque  hasta ahora se suponía que su idea era recuperar la esfera y matar a Naraku pero se dedicaban a ir combatiendo con lo que se iban encontrando tuviera que ver o no con el tema. Ahora hay varios frentes abiertos y coherentes: el bebé/corazón/Môryômaru quiere hacerse más poderoso a base de absorber demonios y conseguir fragmentos de la esfera para poder vencer a Naraku, Kikyo, Midoriko y Kohaku piensan reconstruir la esfera para purificarla junto con Naraku, el propio Naraku espera que sus diversos enemigos con objetivos distintos se encuentren y se maten unos a otros, él siempre espera a que se lo sirvan todo en bandeja, por supuesto y, por último, el grupito de Inu-yasha (donde se incluyen Kôga y Sesshômaru a su manera) que tienen como único objetivo hacerse más fuertes para poder derrotar a Naraku sin tener en cuenta ni la esfera ni el corazón ni leches. Cada vez me da más miedo el desenlace de este manga la verdad >_<