Hace ya casi 3 meses desde que os comenté mis impresiones de los dos primeros tomos de Hot Gimmick y, finalmente, aquí vengo para terminar lo que empecé:
Miki Aihara llevaba mosqueándome desde la primera página del primer tomo pero al precipitarse el final de este shôjo tan culebrónico parece que decidió desplegar todo su arsenal de escenas, conversaciones y decisiones desquiciantes y sin sentido y ha acabado de cargarse lo poco bueno que le quedaba al manga. Es curioso porque yo estaba convencida de que hacia el final intentaría arreglar toda la mierda que se había ido acumulando desde el primer tomo y pintar a todos los personajes como los santos que no son. Pero no, ha conservado la esencia de todos estos cretinos hasta la última página dejando un final de lo más agridulce.
He decidido que lo mejor es ir personaje por personaje analizando todos sus actos sin sentido al detalle, ya sabéis, como terapia para mi pobre corazón.
Empecemos por nuestra estúpida protagonista Hatsumi. A pesar de TODO, parece que después de 9 tomos de tortura psicológica (y que la tirara por las escaleras de pequeña y la reciente bofetada) ha acabado desarrollando síndrome de Estocolmo por Ryôki y al fin ha decidido dar el siguiente paso con él así que... se escapan de casa. Y como no puede ser que ahora que por fin ha tomado la decisión pasen de pronto a mayores, tiene que encontrar una foto comprometedora que obligará a Ryôki a contarle la verdad a Hatsumi... Y ella se siente TAN traicionada que corta con Ryôki (bueno, lo de "cortar" es relativo porque no sé yo si a lo que tenían esos dos se le podía llamar relación pero en fin, eso es otra historia) y se vuelve llorando a casa donde la espera con los brazos abiertos Shinogu. ¿Y a qué gran conclusión llega Hatsumi en esas circunstancias? Pues que, por supuesto, después de estar tiempo infinito dándole largas a Ryôki y a pesar de que le QUIERE (por inexplicable que sea) lo mejor que puede hacer es acostarse con Shinogu al que solo le tiene afecto como hermano y todo por absurdo despecho. De verdad, esta mujer es fantástica.
Esto me lleva a mi querido energúmeno Ryôki que lo único glorioso que hace es revelar toda la verdad de la aventura de su padre para acabar con la farsa. A buenas horas... Y entonces ya, se luce del todo a punto de acostarse con la pobre Saionji (que mira que me cae mal pero es que lo que le hace el impresentable este...) y echándose para atrás en el último momento porque, aunque odie reconocerlo, ya solo tiene ojos para Hatsumi. ¿Y qué otro final nos podría dejar Ryôki si no es demostrar a los lectores que es un engreído hasta las últimas consecuencias ordenando a Hatsumi que se case con él...?
Pero no todo se limita a este par de impresentables indecisos con ninguna preocupación ni consideración por cualquiera que no sea el otro... Quedan dos perlas: Shinogu y Azusa.
Shinogu se mete a monje. A monje. Shinogu. Monje. A la mierda los estudios. A la mierda el esfuerzo. Y a la mierda todo. A monje. Porque se siente sucio supongo. Es fantástico.
Ah ah ah, pero lo mejor de todo es la inacabable perversión mental de Azusa. Cuando al fin descubre que su padre biológico no es el padre de Hatsumi sino el de Tachibana y después de, os lo recuerdo, haber intentado violar a Hatsumi solo para hacer sufrir a su padre a costa de su hija (muy lícito todo) decide que la mejor manera de hacer sufrir al padre de Tachibana es... ¿¡hacer sufrir a Hatsumi otra vez?! ¿Porque para qué dirigir su venganza hacia el culpable genuino de su desgracia pudiendo seguir maltratando a la pobre chica a la que se supone que más aprecia?
Y eso es todo. Muy mona la historia extra de Akane y Subaru. Aunque Akane es una niñata repelente al final se hace querer por mera comparación con los demás. El único que vale la pena al final es Subaru y punto.
Empecemos por nuestra estúpida protagonista Hatsumi. A pesar de TODO, parece que después de 9 tomos de tortura psicológica (y que la tirara por las escaleras de pequeña y la reciente bofetada) ha acabado desarrollando síndrome de Estocolmo por Ryôki y al fin ha decidido dar el siguiente paso con él así que... se escapan de casa. Y como no puede ser que ahora que por fin ha tomado la decisión pasen de pronto a mayores, tiene que encontrar una foto comprometedora que obligará a Ryôki a contarle la verdad a Hatsumi... Y ella se siente TAN traicionada que corta con Ryôki (bueno, lo de "cortar" es relativo porque no sé yo si a lo que tenían esos dos se le podía llamar relación pero en fin, eso es otra historia) y se vuelve llorando a casa donde la espera con los brazos abiertos Shinogu. ¿Y a qué gran conclusión llega Hatsumi en esas circunstancias? Pues que, por supuesto, después de estar tiempo infinito dándole largas a Ryôki y a pesar de que le QUIERE (por inexplicable que sea) lo mejor que puede hacer es acostarse con Shinogu al que solo le tiene afecto como hermano y todo por absurdo despecho. De verdad, esta mujer es fantástica.
Esto me lleva a mi querido energúmeno Ryôki que lo único glorioso que hace es revelar toda la verdad de la aventura de su padre para acabar con la farsa. A buenas horas... Y entonces ya, se luce del todo a punto de acostarse con la pobre Saionji (que mira que me cae mal pero es que lo que le hace el impresentable este...) y echándose para atrás en el último momento porque, aunque odie reconocerlo, ya solo tiene ojos para Hatsumi. ¿Y qué otro final nos podría dejar Ryôki si no es demostrar a los lectores que es un engreído hasta las últimas consecuencias ordenando a Hatsumi que se case con él...?
Perfect timing |
Shinogu se mete a monje. A monje. Shinogu. Monje. A la mierda los estudios. A la mierda el esfuerzo. Y a la mierda todo. A monje. Porque se siente sucio supongo. Es fantástico.
"Porque yo lo digo" |
Y eso es todo. Muy mona la historia extra de Akane y Subaru. Aunque Akane es una niñata repelente al final se hace querer por mera comparación con los demás. El único que vale la pena al final es Subaru y punto.
Mira que te lo advertimos XD
ResponderEliminarJAJAJAAJJA, te dije lo de Akane y Subaru, y si estoy muy de acuerdo con el último párrafo.
ResponderEliminarRecuerdo que yo tuve la misma indignación cuando Shinobu decide meterse a monje... srsly, que se fumó la autora? Por eso me gustaría leer la novela que le da un final alternativo al del manga, pq el final de este a mi no me convenció del todo. Es que de verdad, los personajes son lo puto peor todos xDDD y lo peor de todo sabes que es? Que engancha de mala manera y sé que tarde o temprano vovleré a leermela para indignarme y cagarme en la autora en lo bien que sabe enganchar al lector con este pedazo culebrón D:
Jo, que bajón... si que tiene que haberte mosqueado haberte leído todo eso. Bueno, al menos ya se termino el suplicio.
ResponderEliminarSolo leyendo tu reseña me hierve la sangre... Me la empecé hace años pero la mandé a cagar bastante rápido. De verdad que tienen una obsesión por las violaciones... (no se si lo has tratado en clichés pero lo propongo ^^).
ResponderEliminarSaludinessssssssssssss
Estoy con Xiyima deberías hacer un cliché sobre intentos de violación en los shojo manga, a ver que sale. Lamentablemente es un recurso recurrente casi en cualquier estrato del género.
ResponderEliminarYa te dije que Hot Gimmick no te haría gracia, aunque personalmente lo encuentro un manga muy divertido y culebronico ¿quién entiende las tramas de los culebrones y esos giros estúpidos?, lamentablemente te mantienen en tensión y adicto hasta el final xD
Supongo que ya habrás puesto la serie en el mercadillo XDDD
ResponderEliminarA mí, desde luego lo que más me sorprendió fue lo de meterse a monje... SRSLY?! XDDD
Yo no sé cómo acabé de leer este manga, porque mira que me ponían de mala leche los personajes... Suerte que lo leí de prestado y que se me ha olvidado a grandes rasgos.
ResponderEliminarde verdad se relaciona con su hermano que le pasa es que esta loca definitivamente este manga no hay que leerlo ya me moleste voy a eliminarlo de mi computadora -_-
ResponderEliminarAlguien me podría informar si hay segunda temporada :c no me puedo quedar así. :c
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