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sábado, 9 de julio de 2016

La parodia del héroe


Está bien que me tome el tiempo de escribir una entrada sólo sobre One Punch-Man porque me permite reflexionar sobre aspectos que pueden pasar desapercibidos con facilidad... o al menos a mí me ocurrió en mi primera lectura, muy rápida, atenta sólo a la acción. Los autores se han construido un mundo literalmente monstruoso donde a pesar de que la población es equiparable a la nuestra (a la japonesa en concreto), la aparición de monstruos abominables que destruyen ciudades enteras y matan sin piedad alguna a cientos de personas representa el pan de cada día de sus habitantes. La indiferencia que muestran pues los ciudadanos a los continuos altercados me ha hecho pensar en Dragon Ball. En ese sentido lo veo hasta un homenaje ya que me transmite la misma aura inocentona que el clásico, salvando las distancias claro.


Siendo literalmente invencible, Saitama al final no es más que la excusa para que desfilen a lo largo de las viñetas héroes (y monstruos) de lo más variopintos, de todos los niveles, con objetivos y ambiciones de lo más diversos. Las propias portadas ya reflejan este carácter secundario que adquiere a menudo su protagonista con apariciones estelares de un Saitama relajado e indolente, no importa cuál sea la situación.


Precisamente porque parece que Saitama, sencillamente, suda absoluta de todo, me ha sorprendido mucho (para bien) que en el quinto tomo se preocupe en dejar en buen lugar a sus compañeros aunque sea a costa de ganarse una mala reputación él mismo. No deja de sorprenderme lo buenazo y simple que es como personaje, frustrado porque no hay nada en su vida que lo emocione y, a la vez, terriblemente perezoso, sin ningunas ganas de tener un aprendiz, obsesionado con su calvicie y las ofertas del supermercado... un superhéroe a la japonesa diría yo.


Otra de las genialidades de este manga es la asociación de héroes, con los autores tomándose muy en serio el tipo de organizaciones que se estructurarían en un mundo asolado por monstruos, proporcionando alicientes a aquellas personas dispuestas a combatir a estos seres, con un ranking, varias categorías, diferente remuneración, un jurado de expertos, grupos de héroes que recuerdan a mafias... y un montón de interesados dispuestos a aprovecharse del sistema para intentar ganar puntos haciendo lo mínimo posible. Muy ingenioso.

Me compré One Punch-Man porque eráis todos muy insistentes con que era el mejor shonen del mundo mundial y, la verdad, teníais razón. Mejor compra a ciegas desde... ¡Kids on the Slope!

2 comentarios:

  1. es que es una maravilla! con este no podíamos fallar al recomendartelo XD

    y además de todo lo que dices, el dibujo es una PASADA... incluso cuando los dibuja en plan coña XD

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    1. Tengo que buscar un día los scans para ver aquellos gifs que hacía el dibujante sólo para la versión online... que decían que eran mejores que la propia animación x'D

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