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viernes, 25 de abril de 2014

Seguimos con los estrenos

Intento que no se me acumulen tantas películas por entrada pero es que no sé de dónde sacar el tiempo para escribir. Desde Navidad (¡desde navidad!) las afortunadas en caer han sido:


Las tres infumables horas de El lobo de Wall Street me hicieron mirar el reloj repetidas veces y dar gracias por no haber ido a verla al cine. No comprendo sus múltiples nominaciones, entiendo que sea famosilla y que a la gente le guste porque, al fin y al cabo, la película rebosa tetas, drogas, dinero y abusos varios por lo que era de esperar que triunfara. Pero que la consideren lo bastante buena como para estar nominada a los Óscar o tener un 8,5 en IMDb... pierdo la fe en la humanidad. Es que, a ver, al principio no se hace tan pesada, es entretenida, te ríes con las bromas soeces. Cuando llevas más de dos horas viendo a colgados esnifar cocaína del culo de una prostituta, ganando dinero a espuertas para luego no saber qué hacer con él y volviéndose cada vez más inestables, lo único que deseas es que los metan a todos en la cárcel de una vez y se acabe la película. Lo que me fascina es que casi todo el mundo encuentra la película demasiado larga pero, cuando les pides que concreten más, te dice que les sobran los últimos 15 minutos. ¿Y sabéis qué? Son los únicos en los que no se ven tetas ni gente chutándose cualquier cosa. Lo que me demuestra qué es lo que le ha gustado tanto a todo el mundo del filme. Toda una decepción la verdad. Si hubiera durado la mitad es posible que me hubiera entretenido lo suficiente como para valorarla positivamente porque algunos gags muy buenos sí tiene, no lo niego.

Me los iba a poner de avatar pero eso implicaría unirme
a la fiebre avateril de Frozen de la que tanto me quejé (y me quejo)
Cambiando totalmente de tercio, con una extrema tardanza y gracias a mi querida Sara, pude deleitarme con Frozen en una sala de cine vacía. Una vez vista entiendo por qué todo el mundo no podía evitar colapsar todas sus redes sociales con imágenes de esta película aunque lo que no comprendo es esa especie de obsesión con Elsa. Es una adolescente introvertida incapaz de mantener una conversación con su propia hermana y ya no digamos con un extraño. Le da tanto pánico relacionarse con otros seres humanos que huye y se alegra de poder vivir sola para siempre. Sus momentos más deslumbrantes en la película son un reflejo de su mundo interior pero no de la persona que en realidad es. Por eso no entiendo esa fascinación global por el personaje. A mí personalmente me gusta mucho pero no por la actitud que adquiere en la famosa canción de Let it go sino por su personalidad introvertida, la que demuestra a lo largo de toda la película. Me extiendo tanto con esto porque he visto muchas chicas luciendo orgullosos avatares de Elsa con esa mueca que tan poco la caracteriza y me pregunto si se han parado a pensar el tipo de personaje que es.


Pero ya dejo de quejarme del fandom (que ha sido un ataque demasiado gratuito) y mejor critico un poco el argumento. Por un lado estoy encantada con todos los personajes y por otro no puedo evitar odiar a los guionistas por sacarse tantas cosas de la manga. A mi entender, el origen del problema de Elsa está en un razonamiento totalmente ilógico de parte de sus padres y en una relación fraternal muy poco realista teniendo en cuenta las circunstancias. De hecho, no acabo de comprender cómo es que las hermanas acabaron tan bien para la infancia que tuvieron. Visualmente la película es espectacular y la banda sonora también es preciosa.

Os pongo mi canción favorita de la peli que, no, no es Let it go
y además tiene el plus de ser la primera así que spoilers free!

Una vez se pasa de ese inicio brusco y poco congruente, la película avanza más o menos bien y va mejorando hacia el final, con sus giros más o menos inesperados y un final perfecto que se aleja bastante de la mayoría de películas de princesas de Disney (todos damos las gracias por dar más importancia a la relación entre dos hermanas que a un maldito romance tópico más).

Y, por primera vez, creo que puedo decir que me gusta mucho el Jelsa porque es una pareja adorable y doy gracias a la cantidad de artistas que se dedican a hacer fanarts por amor al arte (y muchos feels) para así plasmar en papel lo que nunca podremos ver animado.


Antes de que esto se convierta en una monografía sobre Frozen, me paso a criticar un poco Robocop. Me llamó mucho la atención el trailer y me dejé comprar por la acción que se prometía. En lo que no pensé fue en la parte más biológica que sustenta casi toda la trama y que me impidió disfrutar de la película desde casi el principio (MANTENER CON VIDA UNA CABEZA, UNA TRÁQUEA, UN CORAZÓN Y UNOS PULMONES POR FAVOR). Pero es que no hace más que empeorar conforme avanza (reducir hasta... ¿un 2%? los niveles de dopamina, es que EN QUÉ COÑO ESTABAN PENSANDO LOS GUIONISTAS). Si al menos todas estas incongruencias científicas sirvieran para dar pie a una trama interesante pues no lloraría tanto pero es que encima se trata de un argumento de lo más insulso y predecible donde, al final, lo único que pretenden es meter con calzador un montón de escenas de robots luchando entre ellos. Es una película de acción sin más, con un trasfondo pseudocientífico mal explicado y sin fundamento ninguno. No la recomiendo a no ser que os apetezca ver robots dándose hostias unos a otros. Creo que lo único bueno de la película es The Novak Element que refleja muy bien lo demagogos que pueden ser los personajes públicos con tal de cambiar la opinión de una masa muy ignorante (que suelen conseguirlo).


Con la proximidad de los Óscar (cuando la vi quiero decir), acabó cayendo también La Gran Estafa Americana. No puedo evitar compararla con El lobo de Wall Street porque es fácil ver los paralelismos entre ellas y, la verdad, sin ser una maravilla, me ha gustado mucho más esta. Más que la trama, que es bastante secundaria y no aporta gran cosa (y que sigue en la línea de esa alergia que comparten todos los guionistas actuales a los finales tristes), me han fascinado los personajes (y, de rebote, los actores también). Muchas mentiras, muchas fachadas, mucha corrupción y una buena dosis de ambivalencia hacen que esta película resulte más enriquecedora que el exceso infinito de Martin Scorsese. Aún así, y durando poco más de dos horas, se me hizo bastante larga y me perdí en algunos puntos del argumento. No se quedará grabada en mi memoria aunque me entretuvo y me hizo reír varias veces. Lo que más me molestó es el final.


Y ya para acabar he visto una película que tenía pendiente desde hace mucho mucho mucho tiempo: 300. Había visto mil veces lo del pozo gigante y la patada legendaria, el "¡espartanos!" ya formaba parte de mi cultura general y gracias al trailer de su secuela (visto inevitablemente en el cine) me había spoileado el final (porque no conocía la historia). Y a pesar de todo la he disfrutado muchísimo. Lo primero que te atrapa es la estética, los colores, el ritmo, la narración. Pocas películas tan épicas como esta puede haber y Gerard Butler borda su papel como Leónidas. De las cinco películas que reseño en esta entrada es, sin duda, la que más me gustó y la única que sé que volveré a ver en un futuro próximo. Su fama es totalmente merecida. Os dejo con el honest trailer para que os echéis unas risas:


En realidad, en estos meses he visto otras películas como la secuela de 300, la segunda parte de la nueva trilogía de Spiderman o Un método peligroso y también le he dado un revisionado a otras como En Llamas o X-Men First Class, pero si las reseño en esta entrada también, para cuando lo haga, habré vuelto a ver más películas y entraré en un círculo vicioso que no terminará hasta que acabe el máster (mínimo). Así que, por hoy, lo dejo aquí.

sábado, 19 de abril de 2014

La Isla sin Sonrisa

He tardado pero, con unos meses de retraso, al fin he devorado mi primer cómic de Enrique Fernández. Aproximadamente, mes y medio después de participar en el crowdfunding de Brigada (del que no os hablé porque lo descubrí cuando estaba a punto de acabar) sin haber leído nunca nada de este autor. Y será porque tiene pocas obras publicadas en España (con las que pretendo matar a mi monedero próximamente).


Eli es una niña con una imaginación desbordante para su edad. Milander es un geólogo atormentado por el pasado. Al coincidir en una pequeña isla de escasa población, será inevitable que pasen muchas horas juntos... a pesar de las reticencias y el disgusto patente del geólogo. Eli intentará hacerle ver las maravillas que encierra la isla con sus múltiples leyendas e historias fantásticas para así poder verle sonreír por una vez. ¿Dónde acaban los cuentos y empieza la magia...?

Alucinante. Empiezo a pensar que he perdido muchos años de mi vida limitándome al manga cuando existe tal arsenal de historias conmovedoras en nuestro propio país. Lo que hace de este cómic algo totalmente mágico y distinto del resto son los detalles. Las cosas que no se dicen. Las que se enseñan pero no se mencionan. Las que nos hacen partícipes de la historia contemplando las pintadas de la pared en lugar de escuchar a los protagonistas hablando sobre ellas. La narración es radicalmente opuesta a todo lo que pasa por mis manos normalmente.

Cómo puede explicar alguien una historia tan claramente
con tan pocas viñetas
Solo leer las historias que le cuenta Eli a Milander ya hacen que la compra valga la pena y, por supuesto, hay mucho más. En general, me fascina que Enrique haya sido capaz de crear un personaje como Eli porque todo en ella hace pensar en una niña: su manera de hablar, de reaccionar, su terquedad, su imaginación... Es un personaje muy bien construido a mi modo de ver.

Muchos son los lectores que ven los paralelismos entre este cómic y las animaciones de Ghibli y es que no me extraña. Aunque yo ni siquiera generalizaría tanto, para mí el paralelismo más fuerte es con El viaje de Chihiro. Pero aunque pueda sonar contradictorio, La Isla sin Sonrisa es un cómic con mucha personalidad y esencia y una mera comparación no le quita ni un ápice de originalidad.


La ambivalencia de todas aquellas cosas a las que puede darse una explicación racional pero también una fantasiosa me parece un ejercicio mental insuperable. Aquí el autor puede dar rienda suelta a su imaginación (que parece infinita) pero el caso es que consigue dominar todas estas apariciones fantásticas dentro del marco más realista de la historia principal sin que nada parezca superfluo u incoherente.

Quizá algunos consideren que el final es demasiado abierto o que la historia es demasiado breve o que no queda claro en ciertos momentos cruciales dónde está la frontera entre la realidad y la fantasía pero yo creo que el autor nos da toda la información que necesitamos, ni más ni menos. Y mientras se nos quede una sonrisa tonta en los labios al pasar la última página, ¿qué más se puede pedir?


En cuanto al apartado gráfico es una puta maravilla sin más. No ha llegado el día que vea un estilo remotamente parecido al de Enrique Fernández. Si ves una de sus viñetas, sabes que es suya. Y te gusta porque sus dibujos son una preciosidad. Y además es capaz de plasmar en sus personajes cualquier expresión a pesar de los rasgos caricaturescos que le caracterizan.

Puesto que se trata de un tomo de Glénat, os animo a comprarlo antes de que lo descataloguen (si es que no lo está ya) porque vale, y mucho, la pena.

martes, 15 de abril de 2014

Últimas lecturas

Por primera vez me veo obligada a poner las portadas japonesas... porque claro, me compré un par de tomos que no salen a la venta hasta verano por lo menos (y no es por ningún enchufe, los encontré en un puesto del Mercat de Sant Antoni y los compré recelosa de que me estuvieran timando pero no, son los tomos 14 y 15 de verdad).


Pues Tegami Bachi se ha convertido sin lugar a dudas en uno de mis mangas favoritos y es uno de los títulos que me recuerda por qué me gusta el cómic de origen japonés (que últimamente empiezo a renegar un poco de él tras descubrir las maravillas que encierra el cómic europeo). En estos tres tomos ha pasado absolutamente de todo y la historia ha dado un vuelco de esos que te dejan con la boca abierta. Que el sol artificial ocultaba algo turbio resultaba más o menos evidente desde hacía tiempo pero los orígenes de Lag eran más inciertos. Pero estos tres tomos dan para mucho más y se da una nueva visión de todas aquellas personas a las que los Gaichus han robado el corazón (un tema que no se había profundizado lo suficiente hasta ahora en mi opinión). Además, conocemos al fin el intrigante pasado de Largo Lloyd y también el del desagradable Garrard. Y, en general, hay una cantidad ingente de información que responde algunas de las preguntas planteadas desde el principio del manga o que, al menos, acerca un poco más la respuesta. Se cierra el primer gran arco de Tegami Bachi y me encanta el rumbo que está tomando la historia. Hiroyuki Asada no se deja nada en el tintero ni se olvida de un solo personaje. 


Después de mucho meditar, el primer tomo que compré de las últimas novedades de Norma fue Black Butler #14 porque pensé que sería la lectura ideal para el bus de vuelta (que lo fue) y me topé con la siempre desagradable sorpresa de las erratas (de cinco tomos que quería comprar, voy y compro el que está mal). En este tomo acaba la saga Titanic/zombies y el flashback aunque la verdad es que no siento que la autora haya dado respuesta a ninguna de las preguntas planteadas hasta ahora ya que seguimos sin saber qué le pasó exactamente a la familia Phantomhive y cuál es el objetivo real de Sebastian (o quizá sí y hace tanto que lo leí que ya no me acuerdo). La nueva saga no promete demasiado, está claro que la autora original no es, emulando su Hogwarts con sus casas, sus colores... A ver por dónde tira la trama que sigo teniendo sentimientos encontrados con este manga, nunca sé si acabará o no en el mercadillo... Pero de momento quiero saber qué pasa.

Por otro lado, ya iba siendo hora de que siguiera con alguna de las lecturas que me propuse para este 2014 y, sinceramente, mis tomos de Terra Formars sí que los veo en el mercadillo más pronto que tarde. Veinte años después (creo) del a todas luces desastre de la Bugs #2, la Bugs #3 está prácticamente preparada para iniciar una nueva expedición a Marte. Solo que ahora el objetivo ya no es erradicar a las cucarachas sino tomar muestras de... ¿tierra? ¿musgo? y cosas así para ver si consiguen un medio de cultivo para... ¡un virus marciano! Biológicamente hablando sigue siendo todo un desastre. O sea, ignorando el tema de que la evolución de las cucarachas NO TIENE SENTIDO ("como hacía frío, se hicieron grandes" POR FAVOR), ahora se ponen a hablar de virus, bacterias y microbios (en negrita porque lo he sacado de una frase textual del cómic y, adivinad qué, las bacterias son microbios (de los virus no digo nada porque los biólogos aún no nos hemos puesto de acuerdo sobre si son seres vivos o no)) porque el guionista no tenía bastante con pisotear la evolución, se tenía que meter también con la microbiología. Pues bien, digo yo que si el virus marciano infecta (mágicamente) humanos, si se quiere investigar con él, pues que usen cultivos de células humanas por dios, que es algo que ya se hace en la actualidad. De todas formas, me cuesta entender que un virus que surgió en un planeta donde aparentemente solo hay dos formas de vida sea capaz de infectar humanos cuando no formaban parte de su ecosistema y que, en cambio, no pueda infectar ningún otro de los millones de especies que habitan la Tierra. Me rindo con la lógica de mierda de este manga, de verdad.

¡Mentira!
Pero dejando de lado la parte más científica de Terra Formars, podría hablar del argumento, un argumento en que un hombre al que le arruinaron la vida decide seguir trabajando para la U-NASA porque, basándose en su propia experiencia vital, qué podría salir mal. Es fantástico también que tan pronto te explican como el procedimiento bugs tiene un 36% de supervivencia, se presentan cuatro candidatos y... ¡sobreviven todos! Muy bien señor guionista, usted siempre contribuyendo a que la historia resulte creíble. El autor también decide que, por qué no, podría mostrarnos algo de contexto de un par de personajes aleatorios para que... empaticemos con ellos supongo y se sirve de las coincidencias y casualidades tan probables en la vida real de que tres amigos de la infancia se reencuentren en una misión suicida. Yo no sé cómo lo hace pero me dan igual todos los personajes, ninguno me da pena, ninguno me hace gracia, ninguno me evoca nada. Y encima tiene algunos gags que pretenden ser humorísticos que lo acaban de arreglar todo. Lo mire por donde lo mire no comprendo la expectación que ha generado esta obra si a cada nueva página me dan ganas de tirarme los pelos. Le doy un tomo más de margen antes de (intentar) venderla.

Son tan monos
El último tomo de esta tanda vuelve a ser La chica a la orilla del mar solo que, esta vez, se trata de su desenlace. No me voy a extender mucho porque más adelante (dentro de unos años a este ritmo) redactaré la reseña que se merece este manga de Inio Asano pero, de momento, os puedo decir que me ha dejado totalmente encandilada. Asano sigue demostrando su capacidad genuina de crear personajes que parecen personas de verdad que ha capturado en sus viñetas. Los adolescentes se equivocan... y se vuelven a equivocar si hace falta, tropezarán con la misma piedra cuantas veces haga falta para acabar aprendiendo. La psique humana es terriblemente compleja y es muy difícil reflejarla en una ficción pero yo creo que podría encontrarme a una Koume por la calle. Este es un tomo para darse cuenta de muchas cosas, para madurar, para cambiar (o no), para ser valiente... y acabarlo todo con un deje de lo más agridulce. Me gustan mucho los detalles y los matices, el poder tener a una persona tan cerca en el espacio pero tan lejos en el pensamiento, en la capacidad de construir una fachada falsa, en la desdoblación de personalidad de Koume, en lo que nos cambian las personas que conocemos y la huella que pueden dejar en nosotros...

viernes, 4 de abril de 2014

Compras de Marzo

Como todos los meses, lo que nunca puede faltar es la entrada de compras.


Empiezo con el único tomo manga español que he comprado en todo marzo y que no es otro que La chica a la orilla del mar #2 con sus dos pósters y sus tres marcapáginas.


Pero no os asustéis que aunque no sea en castellano, manga hay. Este mes me han llegado el super tocho de Wolf Children (que, de hecho, es tan tocho que no sé yo si recomendar su compra que muy práctico no parece y el papel es bastante malo, ha sido un poco chasco), March Story #5 (¡acabo manga!), Sakura Hime: The Legend of Princess Sakura #1 (como veis, me cansé definitivamente de esperar a Planeta, no podía seguir viviendo sin lo "último" de Arina Tanemura) y No Matter How I Look at It, It's You Guys' Fault I'm Not Popular! #1-2 (también conocido como Watamote, que le robé me vendió Nagore porque no le ha convencido). Como veis, acabo un manga (de 5 tomos) y empiezo dos (uno de 12 y el otro abierto), como debe ser.


Aunque hace siglos que no leo nada, sigo comprándome mínimo un libro al mes, aunque quede tan solito en la foto. Es el que me empecé en el Fnac el día que me condunfi con el horario del Kboom. Que por cierto, no vuelvo a poner las compras que hice ese día que para eso ya está la crónica.


Y hablando de cosas que son algo más alternativas... voy diversificando cada vez más. Por un lado, un fanzine más, Mañana #1 que descubrí gracias a Suscrofad (uno de los participantes) y compré al día siguiente cegada por la idea de muchos cómics de ciencia ficción; Enjambre, una antología de cómics y relatos cortos escritos/guionizados/dibujados exclusivamente por mujeres que acaba de publicar Norma y que os recomiendo; Beyond the Box es una historieta corta de Carlos "gurrupurru" Rioja y Álvaro Muñoz que ya leí en su momento en subcultura y que no pude resistirme a comprar en su versión clandestinamente impresa por 2 euritos de nada; y Tus faltas de ortografía hacen llorar al niño dios, de Sopapo, que descubrí en la la librería Loring Art y se convirtió en un regalo inesperado de un buen amigo =)


¿Y qué hacía yo en Loring Art? ¡Ir a la presentación de Enjambre! Ya os hablaré de esta antología con más detenimiento cuando haga la reseña. De momento presumo de mi sarta de dedicatorias de 5 de las abejas del enjambre ^^

martes, 1 de abril de 2014

Cuteness II

No hacía esto desde hace dos años pero hoy se ha dado la combinación perfecta: 1) hace dos semanas que no publico nada en el blog y me odio por ello, 2) en abril me gustaría retomarlo como dios manda, 3) no tengo tiempo de hacer nada elaborado porque el máster me absorbe el tiempo y la energía vital y 4) Ninona me ha pasado este vídeo fantástico y maravilloso:


Ah, y ya que estoy, os recuerdo que hoy es el April's Fool así que cuidadín con lo que leéis por ahí.